martes, octubre 21, 2008

Indolencia


Nada mas doloroso que sentirse triste, es algo que no pasa a menudo, sino que simplemente sucede, eso puede ser por azar, ya que estás muy alegre y algo inesperado te entristece profundamente,. O también te puede entristecer, algo que es más común, -alguien te engaña, cosa que tampoco de ninguna manera esperabas y que se transforma casi en una traición, o por muerte hasta de un inofensivo animalito, el listado de tristezas pueden ser largas, quizás inacabables.
Eso es precisamente, lo que le pasaba a mi querido amigo Carlos, estaba triste. Divagamos en su tristeza, varios días para saber que la producía, las razones parecían dispersas y las fuimos agrupando por tema, para descartar más rápidamente. Finalmente creímos que pudiera ser la falta de Dios, sin embargo si esa fuera la razón, Dios habría ido en su ayuda, y eso aún no pasaba, entonces pensamos en que tal vez la consecuencia de su tristeza estaba en la gente que con sus intereses propios, celos, avaricia, envidia, poder, le terminaba tocando la sensibilidad de Carlos, entonces era la hora de buscar una solución; la mas cercana era actuar de la misma manera, pero Carlos era lo que menos quería, pero amigo mío le dije tú debes entender que tú también eres de carne y hueso y sin querer escuchar mas nada se marchó.
Pasado unos días Carlos no quería salir del apartamento donde vivía sólo, y así permaneció por varias semanas. Definitivamente estaba con una fuerte depresión. Finalmente lo encontraron muerto, en sus manos una carta que decía – tal vez hice mal en quererlos demasiado.

lunes, octubre 20, 2008

Fémina


Deslizó su mano izquierda y delicadamente tomó su pecho, lo acercó a la boca de su hijo que ansioso revoleteaba con sus pequeños brazos, este comenzó a succionar fuerte y rápido como pensando que esa maravillosa fuente se podía acabar.

A sus quince años se sacó la blusa y se soltó el sostén, se observó al espejo y noto que su busto tomaba posición sobre su pecho resaltando levemente.

Una vez en la cama ella se posicionó para que él con su boca le besara sus pechos que se endurecían al contacto de sus labios.

Este es el don maravilloso que poseen las mujeres y que nosotros los hombres de una u otra forma no dejamos de admirar y de querer ser insaciablemente amamantados.

viernes, octubre 03, 2008

Por Siempre


Te tomo en los bosques encantados
Sobre las hojas que caen
Y te llevo por los senderos
Floridos de mis sueños
No hay dulzura más bella
Que ver tu hermosura revolotear
Junto a las aves.
Me quedo con los ríos
Que llevan tu cuerpo mojado
Hasta el mar infinito
Me embriago en tus besos
De noche estrellada
Y te monto a galope
Para escapar juntos
Hacia lo alto de las montañas

No hay secretos que sepultar
No hay misterios que no te pueda narrar
No hay miradas furtivas
No hay rastros de otras
No hay Dios que me restrinja
No hay nada que me impida
No hay vida mas intensa
Que estar a tu lado al despertar.

Te tomo porque quiero
De tus entrañas el brotar
De la vida
Te tomo porque quiero
Ver los años pasar
Te tomo la vida toda
Ni muerto te dejaré de amar.

La Olla

  La Olla. La familia Barrera estaba sentada a la mesa; era la hora de almuerzo y esta vez a diferencia de los días anteriores la sopa tenía...