Desde 1954 más o menos que no se tenía una lluvia de
estas magnitudes, por esos años también la lluvia que duró una hora, lo
mismo que duro este 31 de diciembre de 2017 causó grandes daños en la
pequeña en ese entonces comuna de Puente Alto. Los vecinos se prestaban a
celebrar la llegada del año nuevo cuando la lluvia comenzó levemente
tímida para en unos minutos dejar caer un aguacero que sorprendió a
todos, las tapas de los alcantarillas no resistieron la presión del
agua que como un monstruo indeseable comenzó a invadir las
habitaciones, los pisos que son de madera borboteaban agua sucia, los
vecinos con escobas sacaban el agua de sus casas, el más damnificado era
el Roberto que vive tres casa más arriba que la mía el sacaba el agua
con balde se le mojó toda la casa, nosotros tenemos piso de cerámica y
el agua cayó por una esquina del cielo del comedor por lo que solo era
empujar el agua hacia afuera, mi mujer estaba toda mojada. Todos los
vecinos sacaban agua de su casa en un silencio preocupante.
Media
hora antes de la media noche la lluvia amainó todos se apresuraron,
cuando ya faltaban unos minutos para la llegada del año nuevo a pesar de
las tablas mojadas las copas de champaña se alzaban en sus manos y la
alegría volvía a los rostros preocupados, aunque sus ojos estaban uno en
el cielo y el otro en el reloj.