Nuestro primer beso
fué en la Luna
luego en la gloriosa Cordillera de Los Andes nos besamos
En el campo a la sombra de los árboles nuestros besos eran largos y apasionados
Besos calenturrientos- dijo tu madre que nos atrapó besandonos en tu cama
Que nos casaramos opino la familia para detener el escandalo
Un gran beso en la Iglesia del pueblo así nos matrimoniamos
Ahora los besos eran continuos
recuerdo una noche hasta trece veces nos besamos
El trabajo, los hijos y los besos se alejaron.
Al pasar de los años la bonanza un auto nos trajo y escapando en él los besos nuevamente comenzaron, debo reconocer que estos eran absolutamente descarriados.
De allí no paramos mas de besarnos
nuestros hijos se marcharon
Una enfermedad larga y penosa nos obligo a que los besos fueran casi callados
El buen tiempo llegó y ya ancianos echamos a caminar por el campo esperando apareciera la luna
para que viera que aún nos besamos.
