jueves, octubre 20, 2016

Con el solsito de hoy,
la lluvia de ayer
se resiste en las últimas gotas,
que estoicas se quedán en las hojas primaverales,
dispuestas a morir durante el día si es necesario

Muletas

Las muletas son mis grandes amigas, ellas son imprecindibles en la hora de caminar, me soportan sin chistar, son llamativas, distintivas y alertan a los otros. Estan día y noche a mi disposición y son por ello leales a mi condición. No puedo negar mi dependencia de ellas, pero tampoco debo dejar de aspirar a la mas vil de las traiciones y dejarlas algún día en algún rincón de casa sólo para admirarlas.

La Olla

  La Olla. La familia Barrera estaba sentada a la mesa; era la hora de almuerzo y esta vez a diferencia de los días anteriores la sopa tenía...