viernes, julio 29, 2016

Hoy no hay puntos ni comas ni nada que nos separe
Mis dolores son desquiciativos
están arriba, abajo,
a la izquierda y a la derecha
son persuasivos a los otros
son originales y desiguales
son sumativos
van conmigo a todos lados
leales en todo momento
a prueba de remedios y agorerías
llegaron para quedarse
acomodarse, habituarse
se sienten como en casa
se encariñaron
prometen vida eterna
y una que otra convalecencia
mis dolores tienen familiares
y amigos por todos lados
epidemia o pandemia
dolores son dolores
como amores mal llegados.
Los postes erguidos, sólidos,
estructuras perennes que afean la ciudad
llenos de cables enclavados por
doquier marchan al compás.
Los postes frente a nosotros 
nos ven pasar, soportan nuestros
cuerpos y se dejan orinar
Los postes están por millones
todos altos sucios, rayados, trizados
ollados, sujetando cables los postes
no se van acabar
Antes nosotros muertos que los postes
sobreviran .
Desde mi ventana se ven los focos de luces que esta noche presentan un halo blanco que baja para inundar las calles de un frio que a esta hora debe calar los huesos.
Mi casa tiene dos dormitorios, una sala donde está el computador, una sala para ver televisión, una bodega, living, comedor y cocina. Tiene 62 años más o menos y ha soportado grandes terremotos. La habitamos con entusiasmo siempre le estamos sacando detalles y la sentimos hermosa. Hemos invertido mucho esfuerzo y cariño. De ella podemos tener muchas anécdotas y las más entretenidas historias; últimamente nos dio por cultivar papas, tomates, ajíes y adornar con plantas a la entrada cuando cosechamos la alegría que sentimos con mi mujer es grande. La sala de televisión ha sido invadida por nuestra mascota y nuestras vidas también, nuestro perro desordena todo lo que nosotros podemos ordenar una y otra vez , el goliat es sentido como uno más de la familia. En el baño habitación que no había nombrado tenemos una gran tina allí nos damos largas horas de relajamiento, de escuchar música y de arreglar el mundo con mi señora. Por ultimo en casa hay muchos libros y un escritor.

La Olla

  La Olla. La familia Barrera estaba sentada a la mesa; era la hora de almuerzo y esta vez a diferencia de los días anteriores la sopa tenía...