jueves, enero 02, 2020

Salió del supermercado y al mirar hacia atrás vio que nadie lo seguía. No había pagado el yogur que curiosamente se había quedado en el carro de compras sin que la cajera se diera cuenta. Cuando tomó su bolsa y se alejó del supermercado con cierta inquietud pudo respirar tranquilo. Se sentó en una plaza cercana puso la bolsa sobre el pasto, buscó con su mano derecha sacó ahora, su yogurt con sabor a frutilla y mirando la cordillera en una maña más bien fresca. Rodrigo de quince años saboreo con lentitud y un placer desmedido su yogurt no pagado.

La Olla

  La Olla. La familia Barrera estaba sentada a la mesa; era la hora de almuerzo y esta vez a diferencia de los días anteriores la sopa tenía...