El
cañaño vivía en el pasaje tres, hizo el servicio militar en 1974, se metió a la CNI ; a los años lo dieron de baja del ejército. Me lo
encontré en un local de juegos electrónicos, era el guardia, se puso tan
contento al verme que me invitó a su casa. Vivía en un cuarto a mal traer,
de la mesita tomó una botella de vino tinto y sirvió, levantó la copa y dijo: ¡salud ! mirando una foto grande de Pinochet.
.-Saco wea – le dije y me fui a casa