Lejos de casa

Ya no voy chuteando tarros vacios por la calle como cuando era niño. tampoco doy punta pies a las piedras que adornaban mi camino, no lo haran mis hijos, no la haran mis nietos, el cemento ha invadido todo, se llevó mis prados, mis largos caminos de polvo, mis cerros, mis árboles, las flores, los pájaros, las mariposas, el raco que soplaba por las mañanas y se llevó mis zapatos gastados. Ya no me queda nada de mi pasado mi memoria fallece en los recuerdos torpes que suben a mi cabeza, el cemento entorpece todo, a pesar de ellos por las orillas ha crecido pasto de una manera soberbia y se alzan las pequeñas flores, en forma disimulada las rocio para verlas crecer, para que resquebragen este suelo endemoniado. Hoy he salida en busca de esos caminos polvorientos, que me llevaban a esos parajes verdes donde correteaba mis sueños, donde el viento soplaba las hojas de los árboles que subían bajo mi mirada, pero no hay nada mas que cemento, cemento sobre cemento. Mientrás me alejo de casa